Es la noche del 31 de diciembre y suenan las doce campanadas, pero en lugar de aprovechar la ocasión para enlistar una docena de propósitos con cada uva que engullimos, despedimos el año viejo y le damos la bienvenida a 2020 con la antítesis de esta idea: los anti-propósitos.
De todas maneras, los propósitos son difíciles de cumplir, mientras que los anti-propósitos se nos dan de manera casi natural.
1: No hagas nada
Comienza robándole al día 10 minutos para no hacer absolutamente nada y luego extiende este tiempo hasta media hora.
Verás como en cuestión de días se te dará natural quedarte haciendo nada por largos periodos de tiempo.
2: Abúrrete como nunca
Aléjate del celular, del Nintendo Switch o de la televisión y oblígate a aburrirte tanto como puedas. Verás como en cuestión de minutos tu mente buscará entretenerse con cualquier cosa.
3: Procrastina
Pospón tus tareas tanto como puedas y pronto verás que tu mente comenzará a intentar sacar pendientes lo más rápido posible.
4: Sé anti-tech
Permanece aislado de tu celular o computadora y no recibas ningún correo electrónico tanto como puedas.
Esto ayudará a despejarte y a buscar soluciones a problemas que no recordabas que tenían que resolverse.
5: Tárdate tanto como puedas
Quédate mirando el celular media hora sentado en el retrete, tómate un baño de 45 minutos (pero intenta ahorrar agua) o quédate en la fila de la cafetería (por larga que sea) antes de llegar a la oficina.
Este tiempo a solas te ayudará estar mucho más alerta a lo largo del día.
6: Quédate en tu zona de confort
Nadie te dará una medalla por estar siempre buscando retos nuevos. Si sientes que el trabajo te agobia, quédate un ratito en la zona de confort y disfruta de tener el control de tu entorno.
7: Deja a todos en visto
Dedica unos días para no contestar ningún mensaje.
Ignora al mundo por 10 minutos y luego por media hora. Si eres valiente, te retamos a no contestar un solo mensaje durante todo el día.
8: Finge estar enfermo
Si un día no tienes ganas de ir a trabajar y no tienes pretexto convincente para faltar, entonces finge estar enfermo. ¿Qué va a hacer tu jefe, ir a tu casa a corroborar que te dio una diarrea explosiva?
Atrévete a fingir estar enfermo y quédate en casa a hacer lo que quieras… o permanecer entre tus cobijas como un pastelito de canela recién horneado.
9: Dí que no
Por un día decide negarte a cualquier propuesta que te hagan en el trabajo o tu vida diaria. No siempre tendrás la voluntad de ayudar a la gente o a sacar algún pendiente.
Aprende a decir que no cuando más razón tengas de hacerlo y verás cómo tu mente tendrá tiempo de concentrarse en lo que realmente importa.
10: Aprende a fracasar
De todos los proyectos que tengas en 2020, selecciona el que menos te apasione o más te aburra y aprovéchalo para fallar estrepitosamente haciéndolo mal o no llevándolo a cabo.
Ve como te sientes después de eso. Es liberador.
11: Tómate un tiempo para meditar
Sin importar si hay tareas urgentes o no. Dedica unos días, semanas o meses para meditar, despejar tu mente o simplemente no hacer nada para olvidarnos que “valemos por lo que hacemos” y recordar que “valemos por lo que somos”.
12: Haz lo que más te guste
Ya sea quedarte en cama o jugar videojuegos del crepúsculo al amanecer, dedica un día a hacer lo que quieras y no te sientas culpable porque no llevaste a cabo nada más.
Créenos cuando te decimos que serás otra persona cuando lo hagas.
El crédito de estos increíbles anti-propósitos para fin de año se los debemos a nuestros amigos de High Speed Solutions.